Infancia
Jean-Paul Perrenx nació el 20 de junio de 1950 en Sétif (Argelia). En varios textos ha relatado con humor su infancia, marcada por recuerdos seminales, como un viaje a un circo donde vio leones de verdad: "[...] siempre hay gente que me pregunta por qué pinto leones. Y yo les digo que no sé por qué pinto leones, ya que nunca he visto ninguno, salvo en la Piste aux Etoiles cuando era niño en Argelia, y también un poco en La Vie des Animaux, siempre en la televisión, y una vez en Argel, porque me había deslizado bajo la lona de un circo para entrar sin pagar, ya que hacía los cuatrocientos trucos cuando era niño, entre los seis y los once años, y en este circo había un domador con leones.
Explica así su futura vocación de pintor: "[...] si soy pintor es por el mar que era azul y que siempre miraba en Argelia desde la ventana de la cocina [...]".
Un día, su madre le regaló una caja de lápices de colores: "Sólo recuerdo que mi madre me compró una caja de lápices de colores [...] para que pudiera estar tranquilo en lugar de salir a la calle".
Relata el recuerdo de una primera "experiencia pictórica" que cambia su visión del mundo:
"[...] mis dibujos se colgaban en las paredes de la escuela. Una vez había dibujado una casa en perspectiva por primera vez en mi vida, e instintivamente había entendido bien cómo hacer los lados, las líneas de fuga y demás y había disfrutado dibujando y realmente ese día vi los bancos de la escuela de otra manera".
Su infancia estuvo marcada por la guerra de Argelia. Como la situación se volvió demasiado peligrosa, sus padres decidieron en 1962 venir a Francia e instalarse en Dijon. Allí descubrió el frío, la nieve y las costumbres de Borgoña. Dibuja y pinta sus primeros lienzos. Su sueño es ingresar en Bellas Artes.
Bellas Artes
Pasó cinco años en la Escuela de Bellas Artes de Beaune y luego en la de Dijon, y obtuvo el Diplôme National des Beaux-Arts en 1971.
Durante este periodo, realizó cientos de dibujos de temas variados. Muchos rostros, pero también escenas, a veces fantásticas o relacionadas con el mundo de los artistas o el mar. También realiza esculturas de arcilla. Sus profesores se dieron cuenta de su talento. Participa en sus primeras exposiciones, en la Maison des jeunes de Talant y después en la Galerie Vauban de Dijon, donde presenta dibujos de pájaros (entre ellos un "Albatros") y cabezas de personas (entre ellas un "Esquimal"), así como una escultura de arcilla titulada "Tétard".
En la Escuela de Bellas Artes de Dijon conoció a la que sería su esposa y con la que tendría dos hijas.
1980-2000
En los años 80, participó en concursos y ganó varios premios, entre ellos el prestigioso Prix des sept collines de Roma (en 1980). Realizó numerosas exposiciones: en el Museo Greuze de Tounus (que acogió por primera vez a un artista contemporáneo), pero también en París, Dijon, Tournus, Cannes, Colonia... y, por supuesto, en Mâcon, su ciudad favorita, donde vivió hasta el final de su vida. Además de su actividad artística diaria, enseñó artes plásticas en varias escuelas.
A partir de 1988, inicia una larga serie organizada en torno a un tema obsesivo: las parejas "suspendidas", personajes flotando, durmiendo, a veces atados, en un espacio-tiempo indefinido. En los años 90 y 91, pinta también toda una serie de parejas "fusionadas" ("Personnages assemblés"). Le siguieron las series de "Femmes-girafes" (1996-1997), "Tête à tête" (1997), "Personnages-fenêtres" (1998) y "Les Dormeurs dans l'herbe" (1998-2004).
Después...
Continuó con una serie de "Rostros" hasta 2006. En 2005, realiza toda una serie de dibujos que mezclan humor e intertextualidad, entre ellos las "Parejas adoptivas". En 2010, inicia la serie "Ambiance/ La Fête".
Al final de su vida, sabiendo que padecía una enfermedad desde 2012, realizó varias series: "Les Moineaux" (Los gorriones), "Les Plages" (Las playas), "Les Femmes vers Lunel" (Las mujeres hacia Lunel)... Todos ellos son testimonio de su incansable deseo de pintar, de su talento creativo y de su humor "infantil", que nunca ha perdido. Pintó hasta su muerte en Mâcon, el 20 de febrero de 2015.
Su pintura es inclasificable. Algunos críticos la llaman "expresionismo", otros "figuración onírica". La obra es tan vasta que hay mucho que discutir. Podemos notar su predilección por ciertos temas, presentes en las primeras obras de los años 60 y 70 (el mundo de los artistas, las playas, las parejas, los rostros...), que se encuentran, en obras posteriores, profundizados y renovados.